Viernes, 19 de Diciembre de 2014
La tradición arraigada en lugares de estudio o de trabajo de intercambiar regalos durante la temporada navideña se traduce en una oportunidad de negocios para miles de comerciantes formales e informales en toda la ciudad.
En una de las ferias más concurridas del centro norte de Quito y que se ubica en la calle Ramírez Dávalos, a la altura del mercado de Santa Clara, La Hora comprobó ayer que el denominador común de estas ventas es el de las fundas para el ‘amigo secreto’.
De diferentes modelos, tamaños, materiales y diseños, estas bolsitas se convierten en un verdadero imán para los compradores.
Los vendedores conocen bien la tradición y aprovechan para cantar a todo pulmón sus ofertas de fundas de todos los precios, desde 75 centavos las más sencillas, hasta 2,5 dólares las de cartón con figuras en alto relieve.
“Hay tan poco tiempo para escaparse de la oficina y estas fundas son tan prácticas, ahorran tiempo. Yo compré una corbata, pero hasta esperar que la envuelvan en funda de regalo, hay mucha gente esperando lo mismo en el local que compré, por eso mejor aquí está a la mano”, comentó Julia Bustamante, quien labora en la Av. 10 de Agosto.
Fernando Caiza, presidente de la Asociación de Comerciantes Santa Clara, comenta que las fundas encabezan sus ventas pero aclara que, en general, “todos los artículos que tenemos se venden bien porque ofrecemos a un costo relativamente menor que en los almacenes, por eso es que piden y la feria se mantiene”.
Acota que, por su bajo precio, las fundas para el ‘amigo secreto’ son las primeras en salir, “se venden por sí solas”. (JCER)
45
años tiene la feria navideña funcionando en los alrededores de Santa Clara.
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